Muchas son las series que he visto y estoy viendo, por lo que se me hacía tremendamente dificil saber por cual de ellas empezar éste blog. Tras pensarlo mucho, he decidido empezar por una serie en curso y aunque tengo que admitir que ésta no fue mi primera opción, sinceramente creo que The Good Wife se merece serlo. Seguro que estaréis de acuerdo conmigo.
La Ley de los Angeles, Ally Mc Beal; el Abogado, El Guardian, Perry Mason, son tan solo unas pocas de las decenas de series de abogados que han precedido a The Good Wife y en éste género se podría decir que se han agotado todos los formatos posibles...entonces, ¿que es lo que hace tan especial a The Good Wife?
La respuesta es simple, Todo.
La trama empieza con la historia de Alicia Florrick, cuyo marido, el Fiscal del Distrito, Peter Florrick, es obligado a dimitir al estar acusado de corrupción y acostarse con prostitutas.
Declarado culpable, va a prisión y ella, por los dos hijos que tienen en común, decide apoyarle y mantenerse a su lado.
Debido a los problemas económicos que se encuentra tras pagar los costes de la defensa legal de su marido, decide volver a trabajar como abogada y lo hace en el bufete en el que Will Gardner, un antiguo novio de la universidad, es uno de los socios fundadores.
A partir de aqui, Alicia debe luchar en incontables frentes, con su apellido, con sus compañeros , en los tribunales, con sus hijos, con su marido, con su suegra...con Will....
No puedo acabar de comentar The Good Wife sin hacer una especial mención al personaje de Eli Gold que aparece a partir de la segunda temporada y que le da ese punto divertido que es lo único que podía faltar en la primera temporada, ni tampoco a la enigmática y ambigua investigadora Kalinda Sharma, alrededor de la cual, se desarrolla toda una historia que te mantiene en continuo suspense.
En mi opinión, todo ésto renueva el género y convierte a The Good Wife en una de las mejores series que he visto y sin duda es una de las mejores series del momento.
La recomiendo a todos.
